Espacios Sagrados

Transitando por este viaje fantástico,

En donde sueños y realidades desdibujan sus fronteras,

He recordado, casi sin querer,

Que nada es fijo.

El cambio es continuo, constante, necesario.

Todo se mueve, todo muta, todo se transforma...

Vos, como yo, somos simplemente instantes,

Un sagrado momento en la existencia,
Libres.

Un espacio diminuto dentro de un proceso de mutación que jamás se detiene.

Curiosamente, esta preciosa Libertad,

tiene su base en una sentencia:

Estamos condenados a una perpetua metamorfosis,

Interna y externa.

Unas veces completa, otras superficial, pero siempre activa.

Jamás eres el mismo que fuiste,

Ni siquiera eres igual a cuando empezaste a leer estas líneas.

Cada palabra te ha modificado, la respiración ha movilizado tu interior,

En estos escasos segundos, células han nacido y otras han muerto,

En tu cerebro chocaron energías ordenando a tu sistema...

Siempre Transformación…

¿Puedes sentirlo?

Al comenzar,

creí necesario explicar el objetivo de este espacio...

y luego de perderme en exposiciones que nada explicaban

He llegado a esta humilde comprensión:

Dentro de tu metamorfosis,

Cada cosa toma su propio significado,

Individual, Sagrado, Mágico.

Expondré tan solo lo que quiero

Y tu interpretarás simplemente lo que se te antoje,

Sabiendo que somos perspectivas diferentes,

evitaremos la escurridiza tarea de llegar a un punto en común

para relajarnos en la maravillosa tranquilidad
de sabernos seres eternos

disfrutando de un viaje sensacional
intenso,
a través de la vida que escogemos.

Huenupán

Instante

Entonces, en el furor de la batalla,

En pleno combate a muerte con la vida,

El Guerrero comprende que no hay odio en su corazón,

Y que ni siquiera la guerra es real.

Son meras ilusiones.

El escenario en el que está

Tan solo refleja su estado interior

Sus miedos, sus dudas, sus certezas.

Debe pelear, eso dicta el guión,

Sin él en el centro, la obra pierde sentido.

Y sin embargo,

Siempre existe un momento de quietud

En el cual el pecho se abre

Volviéndolo conciente.

Deja entonces el disfraz, recupera su poder,

Y Ríe.

Por un instante había olvidado que fingía,

Y creyó que era cierto que mataba y que moría,

Pero ahora renace su sonrisa,

Despliega sus alas eternas

Y vuelve a ser Libre.

Aunque acepta que la escena debe continuar

Ya no duda.

Y en paz, completamente seguro de lo que es

Y de lo que puede ser,

Fluye entre personajes que, tal vez,

Aún no recuerden que solo es un juego.

Huenupán

Metales

Humanos de oro, de plata, de cobre, de hierro...

Una antigua división para entender lo que somos.

Ninguno era mejor, ninguno era peor,

Pero todos necesarios.

Los de hierro mantienen con esfuerzo,

Los de cobre aumentan la abundancia, trasladan, integran mercancías,

Los de plata protegen

Y los de oro gobiernan con saber y riqueza espiritual.

A lo largo de las eras, estos hombres se alternaron el poder

Y su resultado es la vida que sabemos.

Ciclos de supervivencia y esfuerzo,

Tiempos de gran abundancia,

Periodos de expansión, de guerras

Y periodos de esplendor y sabiduría conciente.

A cada ser un metal lo predomina,

Y de allí, las diferencias de sentir y de pensar,

Y también de cantidades.

Todos somos necesarios en la rueda.

Los de oro volverán a ocupar el lugar que corresponde,

Porque los de hierro han hecho suficiente en el poder,

Y ya es tiempo de que vuelva la armonía.

Huenupán

Recuerda

Tan solo una palabra.

Fue un instante, casi imperceptible.

Y sin embargo… ¡Cuanto poder!

Libertad en estado puro,

Ninguna jerarquía,

Ninguna norma,

Ningún deber externo.

Una simple invitación,

Un regalo…

No me propuso iniciaciones,

Ni me dijo lo que debía hacer.

No me explicó técnicas innecesarias,

Ni trató de convencerme.

En completa seguridad,

Con sabiduría palpable,

Apuntó directo, precisamente a mi centro,

Depositando lo único que necesita una persona para seguir adelante en lo que sea que se proponga,

Derramó una lluvia de confianza sobre mi,

Y sobre cada hombre a la vez…

“Escucha a la Sangre…RECUERDA”

Sólo eso dijo… y la espiral giró.

Huenupán

Reconocida inquietud

Ya lo se….

Vuelves a sentirte confundido.

Lo que creías saber se desvanece,

Y esas señales tan claras comienzan a borrarse lentamente…

Otra vez pierdes el rastro,

Y luchas.

Incontables aparecen por dóquier,

A decirte lo que debes y lo que no.

Como pirañas atraídas por la sangre en tus heridas,

A mostrarte la “verdad”.

Pero ya no quieres escucharlos…

Y siguen ahí, sin darse cuenta el daño que te hacen.

¿Cómo explicarles que no te importa lo que digan?

¿Cómo decirles que se ocupen de sus vidas?

¿Cómo hacerles sentir lo que tu sientes?

Y entonces te miran y exclaman como idiotas:

Pobre, está tan triste… es que ha perdido…

Pero tu no conoces la derrota, ni la tristeza,

es otra cosa lo que agita en tu interior.

Es la inquietud de no saber,

Es la nostalgia,

Es ese recuerdo que no puedes recordar.

Es esa lucha que no cesa y que no cesa en tu interior.

Ya no dudes y relájate, ablándate y deja,

Deja que otros se ocupen, tu no puedes hacerlo…

Aconsejan esos blandos de espíritu,

Esas mentes acostumbradas a la esclavitud,

A los caminos circulares…

Esos tibios temerosos que no se animan a mirar de frente a la nada que son, 

al abismo de si mismos.

¿Por qué quieren convencerte?

¿Por qué se preocupan por ti?

¿A que le temen?

Si notas en sus ojos que no entienden lo que haces,

¿Por qué cuestionan como si supieran lo que ocurre?

Y así, en ese silencio aterrador en que tus dioses no contestan,

O no puedes escucharlos,

Te debates entre dos libertades diferentes.

Águila y Escorpión

Cisne y Jaguar.

Águila y Serpiente.

Que más da…

Libertades diferentes con destinos diferentes,

¿Dudas?

Entonces sigue, aunque el miedo te aguijonee sin tregua,

Continúa compañero,

La rebelión señala que tu espíritu aún no ha sido anestesiado.

No te dejes caer, te aseguro,

Vencerás.

Huenupán

Vámonos

Acompáñame a encontrar ese tesoro escondido,

Ven aquí, déjate llevar por el viento.

Vámonos a soñar sin pedirles permiso,

Vámonos a creer que realmente importamos,

Vámonos a crear …

…lo que quieras crear con tu magia.

¿Qué no ves?

Nadie va  hacia ninguna parte en verdad,

Solo caminos que cruzan.

Aquel que te dice “no haces lo que debes”,

El otro que indica las normas de vida,

Por allá nuevos guías que pretenden mostrarte el correcto camino…

Nadie sabe en verdad…

¿No lo ves?

Que no existen las formas correctas de obrar,

Ni tampoco un gran libro que explique moral

Son solo inventos, acuerdos,

Son solo ideas tomando los cuerpos.

Vámonos a soñar sin pedirles permiso,

Vámonos a creer que realmente importamos,

Vámonos a crear …

…lo que quieras crear con tu magia.

¿Qué no ves?

Son tus alas cortadas lo que pisas a diario,

Son deseos callados los que quieren saltar 
a través de la sombra en tus ojos.

Y si ahora con pena me dices no es cierto,

Si debido a la hipnosis que corroe tu mente me dices que no,

Que no ves…

No me importa mi hermano, aun te queda esperanza…

¡¡¡Siente!!!

Vámonos a soñar sin pedirles permiso,

Vámonos a creer que realmente importamos,

Vámonos a crear …

…lo que quieras crear con tu magia.

Huenupán

Espada en mano

En tu mano la espada.

¿Qué harás ahora?

Es poder lo que tienes.

Arma y protección a la vez.

Si no aprendes a usarla quizás te lastimes,

O a otros.

Y es posible que te encuentres en batallas sin sentido.

Nadie te odia en verdad,

Es solo que el manejo de tu espada, descuidado,

Provoca ofensas en quien te mira.

Tu no lo notas aunque se ve,

Que llevas el miedo en la mirada.

Relájate...piensa,

No esperes abrazos si colocas espinas en tu armadura.

Y en tu ignorancia sigues usando

Irresponsable dicho poder,

El arma hostil al frente va,

Creando guerras por desconfianza.

Tal vez, si te disciplinaras un poco,

Si buscaras quien te enseñe el manejo de las armas,

No necesites dar golpes a la nada como un idiota

Y solo pelees cuando en verdad se requiera.

Podrías devolver, a conciencia, la paz al terreno,

a tus cuerpos.

Y encontrar el sentido Real de la Guerra.

Si buscaras...

Huenupán

Una noche con luna

Una mañana tal vez encuentre un ángel,

Que en una noche sin luna haya caído,

Lo cuidaré y sanaré sus alas rotas…

Para que vuele.

Lo llevaré hacia mi hogar mientras lo calmo

Y limpiaré esas heridas que le duelen.

Lo abrazaré hasta sentir que ya no tiembla…

Para que duerma.

Y cuando pase el tiempo y sea fuerte,

Cuando sus alas tomen brillo y sean firmes,

Cuando sonría agradeciendo mi cuidado…

Será libre.

En Libertad decidirá que es lo que quiere,

En Libertad me explicará por qué ha caído,

En Libertad podrá mirar dentro de mi alma…

Y allí sabrá.

Y en otra noche con luna un ángel triste,

Resurgirá recuperando lo perdido,

Y quien lo halló aquella mañana será libre…

Y entenderán, quizás...

Destino.

Huenupán

A modo de respuesta

 

Comentaste hace unos días que la filosofía barata no podrá cambiar las cosas, que deje de escribir frases lindas y haga, que si no creo en imposibles entonces empiece a hacer, que el hambre, la prostitución, la corrupción, los superpoderes, la soberbia de algunos políticos, la droga y tantas otras cosas…

Medite mucho tiempo en tus palabras, buscando una respuesta.

Tienes razón.

Nada hago para que eso cambie, o quizás mucho.

Depende.

Mi acción radica en despertarte a vos que estás leyendo.

No voy a salvar niños a Etiopia, ni a darle de comer a los hambrientos de mi país, no voy a ser presidente, ni voy a luchar contra la corrupción en mi ciudad.

Mi mensaje apunta en otra dirección, contribuyo a crear una grieta en las mentes.

En tu esquema, las cosas ocurren de afuera hacia adentro. En el que yo utilizo, tu adentro es lo único que me importa.

¿De que me serviría trabajar y trabajar y trabajar contra la prostitución si no logro entender porque te prostituyes?

¿De que sirve que realice marchas contra el terrorismo si no puedo mostrarte que el terrorismo es construido por los mismos que dicen luchar contra él?

¿De que me sirve luchar y hacer si no se contra quién lucho ni a quiénes sirve lo que hago?

Escúchame, no busco adeptos, no necesito seguidores, no quiero que me crean, quiero que descubran por su cuenta que las cosas no son imposibles, que los cambios ocurren primero dentro de nuestras mentes.

Piénsalo, querido criticador,

¿Cómo es posible que se acabe la mentira y el engaño si no somos capaces de dejar de mentirnos a nosotros mismos?.

Tu que tanto me exiges… ¿Has dejado de engañarte?

¿No eres también corrupto con tus emociones, negociando entre el placer y el deber a cada paso?.

¿Acaso no obligas también por una especie de Amor que te han enseñado?

Se que eres un ser inmensamente maravilloso, es solo que tu no lo sabes.

Si yo peleara contra ti, estaría peleando conmigo mismo, estaría intentando obligarte a tomar mi punto de vista, estaría dejando de confiar en tu propia capacidad como ser humano para salir a delante por tus propios medios.

Tu no confías en que cada persona pueda ser lo que desee ser, y por eso indicas que es necesario hacer algo por ellos…

Deja ya de engañarte, no lo haces por ellos, lo haces por ti mismo, por tu propio orgullo, por tu propia soberbia…

“Cada uno es responsable por su propio universo”

esta es la manera que elegí para expresarme.

No te agrada, usa otra y no me empujes a tu cárcel.

Quieras o no, daré batalla.

Pero no lo hago por ellos, ni siquiera por ti,

Lo hago por mi, por mi Honor… por mi Verdad.

Huenupán