martes, 4 de enero de 2011

Absurda terquedad



¿Cómo hablarte a ti que no puedes oír?

Sé que existe una manera,

Lo sé.

Guiado por mi absurda terquedad tropiezo cada vez con la misma piedra.

Un cascote enorme, inmenso,

Tan fácil de esquivar…

Pero magnético.

Ensimismado, absorbido por el círculo en mi manera de actuar,

Es necesaria una punta.

O una línea.

Algo para romper la monotonía de la esfera

Y avanzar.

Aunque sea ilusión,

Aunque se vuelva al mismo punto de partida.

Juguemos a que avanzar físicamente es posible,

Hagamos el intento.

Siempre habrá tiempo para darse cuenta de que nada existe,

Siempre lo habrá…

Pero no sé hasta cuándo tendremos la fuerza para sostener la ilusión,

Y la nada, con su infinito misterio

Nos abrace.

Huenupán

No hay comentarios: